Cándida
«Yo amo el tango, si ustedes no lo entienden, no me importa mezclarlo un poquito para conseguir que les guste»
Aprovechamos la estancia de Cándida en Barcelona para entrevistar a sus dos personajes claves. Candi Imbernon y Juan Barcala estuvieron presentándome poco a poco sus canciones, y hablando de cómo ven ellos el tango y la música en general.
¿Que tal estuvo el concierto de anoche en Heliogabal?
Bueno como estábamos avisados de que Barcelona era una plaza difícil, por la competencia, estamos contentos con lo que ocurrió. Es una sala pequeña pero nosotros veníamos en formato dúo, Candi Imbernón a la voz y Juan Barcala a la guitarra.
Habíamos estado en Caja Madrid presentando Mil Perdones en el 2008, tuvimos muy buen sonido y pudimos traer toda la banda que teníamos entonces.
En vuestro nuevo trabajo Arbolito brutal, habéis reducido los componentes, ya no hay piano, el contrabajo aparece sólo en tres temas, ¿a qué se debe?
Bueno nos hemos radicalizado, primero por que gente como el bandoneista Orlando Dibelo, tiene una edad en que ya no va a tocar a según qué garitos, segundo porque tenemos que reducir gastos, según como están las cosas.
¿Tan mal están las cosas?
Una parte del público está convencido de que las propuestas tienen que ser gratuitas o por sistema de cobro inverso, si me gusta te pago, toda la movida anti-sistema está muy bien para según qué cosas, pero si los músicos no podemos cobrar dignamente por lo que hacemos, la música en directo se va a acabar.
Dices que os habéis radicalizado, ¿en qué sentido?
Bueno después de muchos años haciendo tango, el Mil Perdones, Disc Medi 2008 tenía ese título como pidiendo perdón a los tangueros. Perdonen pero yo esto lo voy a mezclar con otras cosas.
Si pero en el nuevo trabajo seguís cerrando con Piazzolla.
Si, y hay milonga, pero nos interesaba forzar para ver qué pasaba al mezclar tradición con actualidad. Además en aquel trabajo algo muy importante fue el trabajar con Marc Parrot, eso fue impresionante. Después hubo un Epe de cuatro canciones y el resultado final de este cambio es el nuevo trabajo. No nos hace falta un bandoneón fijo ni un músico de tango, ni un pianista para hacer lo que queremos hacer, sigue habiendo milonga, chacarera pero si queremos vamos a poner una base electrónica si nos apetece.
¿El tema de El cantante y la cantanta sería el ejemplo claro?
Exacto podemos empezar con una melodía, meter theremín por el medio y acabar por reggaetón. Empezar por la madera y la tierra y meter lo sintético. Además en directo el batería Antonio Iglesias que es muy imaginativo se desata, puede acabar tocando por la pared.
Por que mientras Candi hacia tango ¿ Juan Barcala en que estabas metido?
Yo llevaba los audiovisuales y el concepto técnico de sus conciertos, pero musicalmente mi guitarra proviene del pop.
Me sorprendió gratamente que en Mil Perdones hubiese una versión de Escenas olvidadas de Golpes Bajos.
Es uno de mis favoritos de los ochenta (responde Candi), porque yo también vengo de otros cambios, empecé con folk, después tango y ahora busco más vida después del tango. El tango era por mi abuelo. Pero de jovencita quería ser Coppini. Ya sabes que todo es milongeable en esta vida.
¿Las versiones de este Arbolito brutal?
Son , Elástico , que es un tema de Miquel Gil, un tema antiguo de una formación donde estaba colaborando que se llamó Menos es na, ahí ya estábamos volcados en Tom Waits, aun que nadie lo valorara. La otra versión es Johnny Guitar, nos encontramos por casualidad con la película y nos marcó mucho. Los colores tan vivos, Joan Crawford en medio de tantos hombres pidiendo que la cuelguen.
Bueno el primer tema, Arbolito brutal define bien el momento del grupo, la letra lo explica perfectamente.
En vez de decir lo que somos, neotango, tango & roll, blues, pensamos que lo mejor era decir lo que no somos por eso la letra. Ahora mismo es mejor definir lo que no somos. Siempre intentando evitar la palabra fusión que por desgracia a perdido su función.
Otro tema es Milonga de Manuel Flores, recuerdo que Carmen Linares decía que en la milonga alguien debe morir.
Exacto una milonga no tiene que hacer el soniquete desde el principio pero al final si que aflora.
¿Antonio el negro?
La escribí en Buenos Aires. Cuando yo llegué allí tango poquito, lo que había era rock, ellos adoran su rock nacional, y aquí quiero hablar de eso. Su rock nacional era bueno, nosotros en los 80 no tocábamos tan bien. Pero nos divertíamos más. Ha envejecido mejor nuestro pop de los ochenta que su rock nacional.
En este disco oigo menos la guitarra que en trabajos anteriores.
En Mil perdones yo tocaba lo que me pedía el pianista, ahora toco la guitarra cuando hace falta pero muchas veces la guitarra no es el único instrumento que necesito para expresarme.
Mas negritud, Etiqueta negra.
Etiqueta negra y el Arbolito definen el carácter del disco, etiquetas llevamos todos pero tanto a nivel músico como a nivel mujer puedo pedir que no me etiqueten.
Sigues manteniendo letras de mujer fuerte.
Bueno no voy a ir con puños de acero, pero como mujer estoy ahí y estoy harta de etiquetas de «señora» «se te va a pasar el arroz» «no tengo edad para tonterías de estas de cantar» y me rebelo.
Para cerrar Milonguera, o sea Piazzolla.
Estábamos ensayando – jugando con La menor y el contrabajo, David Albelda hizo unas notas de Piazzolla. Pensamos genial algo fresquito después de la épica de Johny Guitar. Además me gusta que se sepa que el tango sigue estando ahí, si alguien no se había dado cuenta se lo recordamos.
+ info | relacionados | Candido Querol