Albert Sanz & Javier Colina
«Sampa», Youkali music, 2018
Muchas son las caras poliédricas del contrabajista Javier Colina, nuestro particular Charlie Haden patrio, un portento de culo inquieto, que siempre está a la que salta para embarcarse en alguna nueva aventura musical. Ya sea con Josemi Carmona (Ketama), con su propio cuarteto, o con el trío que conforma con otros dos titanes como Miralta y Sambeat. En el caso que nos ocupa se presenta en formato minimalista de dúo con el pianista Albert Sanz, y con los horizontes musicales de Brasil en su sextante (ese coloso americano que encandiló a músicos de la talla como Stan Getz o Bill Evans, y donde se gestó ese peculiar género conocido como bossa nova). Colina no es la primera vez que se ve las caras con este músico valenciano. De hecho ya había coincidido con él en 2011 para grabar el disco O que será, junto al reputado baterista norteamericano Al Foster. El diálogo entre las blancas y negras y las cuatro cuerdas del contrabajo es de lo más seductor e intimista, como si hubiese sido rubricado en alguna terraza de algún club carioca en una calurosa noche de caipirinhas y con el Cristo del Corcobado en lontananza. La vaporosidad y sensualidad del material elegido queda patente en standards como O velho Francisco, de Chico Buarque; Sampa, composición del gran Caetano Veloso, donde cuenta con la colaboración de la efectiva y sugerente voz de Silvia Pérez Cruz; Na carreira, un clásico de Edu Lobo; Demais, obra de la banda de fusión Azymuth; No assento do onibus, de Alessandro Penezzi, donde Colina se enfrenta airosamente a las teclas del acordeón; Valsa brasileira, ese cristalino himno interpretado por tantos músicos como Djavan o Chico Buarque, entre otros; Luz negra, del maestro de las seis cuerdas Baden Powell; y Medo a amar, de Vinícius de Moraes, otro de los grandes testaferros de la música brasileña. Escuchar este disco es como enfrentarse a capítulos memorables de una novela en los que una garota «mais linda», como es la bossa nova, nos ofrece su mejor versión cuando cae la noche y las luces y los cuerpos languidecen. + info I Relacionados