Shirai – Arcadia

Shirai
“Arcadia”
World Village / Harmonia Mundi Iberica, 2006
www.harmoniamundiiberica.com

En la reedición de su tercera entrega discográfica, Shirai, formación afincada en Banyoles (Girona), se muestra tal y como ha venido siendo en su reciente historial creativo. Más que un álbum de música al uso, sus doce composiciones son una auténtica experiencia, un conjunto de piezas musicales que promete una “sensación de gran bienestar y relajación a través de los sonidos”. Es decir, música para la meditación, tipo new age, etiqueta que basta para que más de uno salgamos corriendo. Pero igual que las portadas de los discos engañan, también lo hacen las notas de prensa: sin duda habrá gente a quien relaje este disco, Arcadia, y habrá incluso quien consiga meditar con él.  Sin embargo, podríamos definirlo como un trabajo inquietante, en el mejor sentido de la palabra, con un sonido que activa la escucha, que sorprende a cada paso, una propuesta arriesgada y experimental, de una belleza oscura, casi gótica y perfectamente noctámbula.
Al atender a este trabajo deberá olvidarse del esquema típico de canciones e interpretaciones musicales usuales. Arcadia es una creación que partiendo de la creatividad de sus promotores parte hacia el interior de la persona. Es más un sonido envolvente que un trabajo en el que se trate de exponer una idea o una forma de concebir el mundo o los sentimientos, y por supuesto, alejado de cualquier etiquetaje comercial. El lenguaje es otro, estamos jugando en otra liga.
La base sonora se realza a base de cuencos y didgeridoos de cristal de cuarzo a la que se suman cuencos cantores tibetanos, percusiones varias, violín y laúd árabe, junto a juegos vocales extremos y atípicos en el que participan Mohamed Souleiman y Ayoub Bout, conocidos por formar parte de la Orquesta Àrab de Barcelona.
El disco encantará a los amantes de los paisajes sonoros de Lustmore o de Francisco López y se convierte en una joya para todos aquellos que se aburren con las propuestas musicales previsibles y para los que mediten a base de emociones fuertes. Vibre con su cuerpo y el alma, pero no se pierda, vuelva pronto. // Brigitte Vasallo y Antonio Álvarez