Orchestra Baobab
Orchestra Baobab
"Made In Dakar"
World Circuit Records / Nuevos Medios, 2007
Cinco años han tenido que pasar para que volvieramos a tener noticias de una de las mejores orquestas que haya dado Mamá Africa. Y es que hablar de la Orquesta Baobab es referirse a toda una institución. Al igual que la Bembeya Jazz de Guinea Conakry o la Rail Band de Malí, la Orquesta Baobab maleó los mimbres de la música cubana para adaptarla a la idiosincracia local, en su caso de Senegal. Aquí las congas se sustituyeron por el tambor sabar y los ritmos del mbalax se hermanaron con los del son isleño. Made In Dakar continúa con el revisionismo del cancionero clásico de la formación – el de la década de los setenta del pasado siglo – iniciado en Specialist In All Styles (World Circuit, 2002). En este trabajo el cantante Assane Mboup – líder de su propia banda, Le Mbouba Jaly – adquiere un mayor protagonismo. Así aborda temas como el celebérrimo Pape Ndiaye, el entrañable Nijaay – cantado a dúo con el ubicuo Youssou N´Dour – o el festivo Ndéleng Ndéleng. La guitarra del togolés Barthelemy Atisso sigue tan incisa y brillante como siempre, así como las andanadas de saxo del senegalés Issa Cissokho, que se mantienen increiblemente vigorosas. A tenor del repertorio aquí expuesto las facultades de la orquesta se encuentran en su momento más dulce, pese a la avanzada edad de algunos de sus integrantes. Entre las canciones que destacan se encuentran las románticas Aline o Bicowa; las añejas Cabral y Beni Baraale, con un regusto a picante ají; o las fogosas Ami Kita Bay y Colette. La lista de colaboradores para la ocasión es la del saxofonista Ibou Konaté, el percusionista de tama Thio Mbaye, el guitarrista Baba Nabe, y el trombonista cubano Jesús "Aguaje" Ramos (Buena Vista Social Club, Afro-Cuban All Stars). Una vez más la super producción de Nick Gold y la exquisita factura del fabuloso combo causa estragos. // Miguel Angel Sánchez Gárate