Keziah Jones

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Round About Midnight
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Teatre Coliseum, Barcelona. 25 de abril de 2014

Excepcional ciclo de conciertos el de Round About Midnight. En poco más de un mes han visitado, o van a visitar, el emblemático Teatre Coliseum artistas de la talla de Eliane Elias, Ayo, Richard Bona, Asaf Avidan o Blind Boys of Alabama.
Para estos conciertos la sala se transforma, toda la platea desaparece para dejar sitio a unas pequeñas mesas, para cuatro personas cada una, que permite ver el concierto de forma cómoda y con buena visibilidad. Sin embargo para el concierto de Keziah Jones quizás el tener que estar sentado, para algunos, fue más un handicap que una comodidad.
Por otro lado el destino quiso que en solo dos días se cruzaran las visitas de dos grandes artistas nigerianos, el propio Keziah Jones y el heredero del abrobeat Femi Kuti. Dos músicos que además han colaborado mutuamente en alguno de sus discos y aunque las dos propuestas puedan tener puntos de unión, en directo son diametralmente opuestas. Mientras Femi tiene una gran banda, Keziah se presenta en trío. Femi hace afrobeat del siglo XXI y Keziah puede beber del funk, del rock, del blues o incluir pinceladas de afrobeat. Femi vino a actuar al 25 Guitar Festival y Keziah a este ciclo de conciertos, en teoría más íntimos.
Pero aquí hemos venido a hablar de Keziah y su concierto.
La actuación estaba anunciada a las 23:00, aunque empezó pasadas las 23:30, quizás para estar más cerca de la medianoche. Si tenemos que definir el público, diremos que la media andaría entre los 30-40 años, o algo más, y bastante conocedora del artista. Como decíamos se presentó en formato trío, pero en autentico “power trío”. Un bajista descomunal, musicalmente hablando, y un batería súper eficiente, situados a cada uno de los lados y Keziah en medio.
Acaba de editar un nuevo e interesante disco, Captain Rugged, donde da vida a un imaginario súper héroe africano que actúa como una “sátira del poder, la política y la magia” y le permite contar historias sobre la inmigración, los refugiados, los sueños rotos y el exilio. Y no solo da vida a ese súper héroe en las canciones, en la portada también aparece él con una espectacular indumentaria. Sin embargo en cuanto salió al escenario, saludó y aclaró que íbamos a poder escuchar una selección de todos sus discos. Imaginamos que como sus visitas están muy dilatadas en el tiempo, prefiere hacer un repaso a su obra, incluyendo eso sí, temas actuales. Como información decir que Keziah tiene como norma editar un nuevo disco casi cada cuatro años.
Lo que parecía evidente es que su mezcla de afro-blues-funky-soul, y que él definió como “blufunk”, con ese formato de trío iba a ser mucho más contundente. Y así fue.
Abrió con fuerza con Funk’n’circumstance y Dear Mr Cooper, antes de regalarnos un precioso Million Miles From Home. Curiosamente y quizás por el formato de concierto, casi sin posibilidad de movimiento para el público por causa de las mesas, vimos a un Keziah realmente muy parlanchín. Entre canción y canción contaba algo, o el origen de cada una de ellas, o explicaba anécdotas o relataba pequeñas historias, además con ese carisma y personalidad única. Aunque personalmente siempre lo he visto en una liga imaginaria al lado de otros músicos como Ben Harper, Lenny Kravitz o el mismísimo Prince, sobre todo por ese falsete que utiliza a veces cantando.
Cayeron también Wisdom Behind the Smile (Cash) y el intenso Kpafuca, pero es que las autoversiones que hace de sus canciones cuando las toca en directo, se enriquecen gracias a su sugerente voz y a esa manera única de tocar la guitarra percutiendo constantemente las cuerdas, por no decir su impresionante presencia física, bailes incluidos.
Como sorpresa y en la potente versión del tema de Rick James, Below The Funk (Pass The Joint), se puso una capa (la que luce en su video de Afronewave) y bailó para deleite de muchos o muchas. Pero siguió sorprendiéndonos con la interpretación de Blufunk is a Fact, porque puso una guitarra acústica de manera horizontal en una mesa y la tocó a modo de percusión, pero con tal pasión que acabó la guitarra por los suelos. Después le dejaron solo y nos relajó con el Femeliarise y The Invisible Ladder. Aunque al acabar, se fue y entraron bajo y batería para demostrar lo que es poner energía tocando. Ese tiempo lo aprovechó Keziah para cambiarse y vestirse de Captain Rugged, para cantar justamente Rugged y después una personal y muy rítmica versión del All Along the Watchtower. Y seguidamente su gran éxito Rhythm Is Love. Aquí el público ya no pudo aguantar más y saltó de las sillas para ponerse a bailar. Eso para sufrimiento de los “acomodadores” que intentaban que la gente volviera a sus sillas (¡asombroso, un concierto donde no quieren que la gente baile!). Por suerte el público no hizo caso y dejó aflorar sus impulsos. Todo acabó con Memory y con el público ya entregado.
En total fue algo más de hora y media de rotundo blukunk, quizá algo falto de melodía, pero con un Keziah en forma y entregado. De hecho acabó el concierto y ni se fue, se quedó un buen rato haciéndose fotos y firmando autógrafos con todos sus fans.
Es que como nos dijo hace un tiempo, lo tiene muy claro: “hay algunos que le atraen mis letras, a otros la música o incluso mi persona, pero mientras que haya algo que comunique y que llegue, la forma no me preocupa”. Comunicación es el secreto. +Info | Relacionados | Miguel Amorós.