Al Andaluz Project

yH5BAEAAAAALAAAAAABAAEAAAIBRAA7 - Al Andaluz ProjectAl Andaluz Project
Canovelles, Teatre Can Palots
10 de mayo de 2008

Poco antes de interpretar Nassam alaina ihawa, Aziz Samsaoui, exquisito tocador de qanun, explicó que, como concepto, Al Andaluz Project sigue el modelo de los grupos que animaban las fiestas, las recepciones y los más diversos momentos de las cortes andalusíes y cristianas de la Iberia medieval. En estas formaciones coincidieron músicos judíos, cristianos y musulmanes que durante siglos, por encima de las tensiones religiosas y sociales propias de todas las civilizaciones, intercambiaron experiencias, conocimientos, instrumentos y repertorio. Y fue una pequeña parte de este repertorio, con más de siete siglos de historia, el que tuvimos la suerte de escuchar el sábado por la tarde en Canovelles, la pequeña localidad catalana que tuvo el privilegio de acoger el estreno español de esta formación. Y hay que decir que la fuerte lluvia no consiguió detener la expectación generada por este concierto y que la platea del teatro de Can Palots presentó un aspecto de lujo. 

Un lujo similar al que se exhibía desde el escenario, con ocho artistas de reconocido prestigio: del grupo alemán Estampie, Michael Popp, ûd, saz y otras cuerdas, Sigrid Hausen, voz y flautas, y Ernst Schwindl, zanfona y nyckelharpa; de las formaciones valencianas L’Ham de Foc y Aman Aman, Mara Aranda, voz, Diego López, percusiones, y el mencionado Aziz Samsaoui; y para redondear la propuesta, Jota Martínez, zanfona, vihuela y cítola, y Iman al Kandoussi, voz. El concierto se inició con una declaración de intenciones muy clara a favor del intercambio y el respeto entre culturas: sonaron, seguidas, Gran dereit, una de las 427 cantigas de Santa María recogidas por el rey Alfonso X, Morena, tradicional sefardita que nos permitió comprobar que la voz de Mara Aranda estaba fina, fina, y la mencionada Nassam alaina ihawa, con Diego López sorprendiéndonos con un trabajo a dos manos del riq y el bendir (la pandereta y el pandero árabes, respectivamente). 

Este inicio, sin embargo, resultó un poco frío, aunque Samsaoui y Schwindl dejaron desde el principio detalles musicales de categoría con sus instrumentos. Por suerte, poco a poco el grupo superó los nervios iniciales (bastante evidentes en la voz de Iman al Kandoussi, a quien se notó falta de fuerza) y fue creciendo en potencia sonora, equilibrio rítmico e intensidad melódica. En este sentido destacaron Los caminos de Sirkeçi, El pandero y Las suegras de ahora, tres temas en los que Schwindl y Martínez hicieron coincidir  sus zanfonas, ya fuera al unísono o por separado. Las pieza andalusíes, por su parte, tenían un aire mucho más delicado, incluso podría decir sofisticado, que dejó un momento precioso durante la interpretación de la nuba Kudam al-Maya, con la participación del qanun de Samsaoui, la voz de al Kandoussi, el riq de López y la flauta de Hausen. Ya en el bis, la larga y contundente interpretación de la cantiga A Virgen mui groriosa (cuando tomaba el saz, Popp parecía más un enérgico guitarrista de rock que un calmado intérprete de música antigua) remató una excelente velada que dejó muy satisfecha a la audiencia. Sin duda, una propuesta muy interesante a la que seguir la pista. // Jordi Urpi