Pau Moltó
French Horn Jazz Project, SedaJazz 2020
Pau Moltó es un músico y compositor valenciano que ha decidido apostar por un instrumento tan poco usual en el jazz como es la trompa, para este French Horn Jazz Project. No ha dudado en escoger dos sopladores de peso para compañeros de aventura, los también valencianos David Pastor (trompeta y flugel) y Vicent Pérez (trombón), Pastor es una de las figuras más reconocidas del jazz actual, por todas sus colaboraciones, además de su proyecto de Un- Roots. Vicent Pérez es un músico que puedes encontrar en muchos proyectos dónde el jazz se hermana bien con la electrónica. En la sección rítmica el catalán Jordi Gaspar al contrabajo (otro famoso compositor e interprete) y el gallego aunque residente en Barcelona Ramón Ángel Rey (otro nombre importante del jazz catalán) y en el piano, una sorpresa (para un servidor, aunque ya tiene editados tres discos, no la conocía) la navarra Kontxi Lorente que me ha sorprendido gratamente. Las composiciones son de Moltó, excepto un par de temas que ya comentaré en su momento. First Step, no me resulta fácil diferenciar el sonido de la trompa, rápidamente identifico la trompeta de Pastor pero no sabría escoger entre la trompa y el trombón, tiempo al tiempo. El Bop se instala con facilidad y lo primero que me atrapa es el piano, con un swing arrebatador conduce con destreza al sexteto, hasta que los vientos empiezan con sus solos habituales. La trompeta de Pastor se lleva la mejor parte. En camí, siguen por la misma línea (leo en las notas del disco que es el camino que sigue a la música de Julius Watkins, considerado el precursor de la trompa en el jazz). Buen solo del contrabajo de Gaspar, responde Pastor con ese sonido que tiene tan claro y preciso y a continuación la trompa de Moltó demostrando que puede ser tan lírica como la que más. Es curioso la gran cantidad de vientos que aparecen continuamente en el País Valencià. Ese trabajo callado de las bandas de cualquier pueblo ha dado su fruto. B and B (Julius Watkins) nos trasladamos al Detroit de los 50’ Watkins se codeaba con Coltrane, Davis, Freddie Hubbard, Mingus. Entra la sección de vientos como si lo hubiesen vivido y bebido in situ. Con arreglos del propio Moltó el tema anda magnífico. Y ese piano de Lorente vuelve a dejarte tocado. Otro gran solo de Gaspar. Y otro de Ramón Ángel. Hay espacio para el trio básico como era de esperar. The good friend, juego bonito de cómo se van combinando los tres vientos. Siguen con el be bop, y sigue entrando el piano con una riqueza cromática que enamora. Dogs at the door, el ritmo que impone la batería de Ángel Rey te obliga a mover el pie, el swing se instala en todo tu cuerpo. Sleeping cat, todo se ralentiza, los vientos como si soplaran en diferentes alturas, van dibujando un paisaje mediterráneo lleno de azules del maestro Sorolla. El contrabajo de Gaspar les da una línea dónde apoyarse con seguridad. Hay un viento más hiriente que quizás sea el Flugel de Pastor. De la punta a Nazaret, aunque la entrada parece despistarnos del rumbo enseguida volvemos al mismo mar. Una melodía casi tradicional se va instalando de fondo pero la libertad del jazz le permite al grupo salir y entrar como quieren, nueva demostración del fraseo apabullante de Pastor, y réplica de la trompa con buen acompañamiento de la batería, muy bueno. Rio Club, nos vamos al jazz latino, otra vez una melodía reconocible y el juego de los vientos perfectamente conectados. Un tiempo muy marcado que te permite seguirlo con el pie o con la cabeza, tú mismo, solo disfrútalo a tu aire. Para terminar Em N Em (Mark Nightingale) se trata de un trombonista inglés actual, y este tema cargado de swing permite a Vicent Pérez mostrar toda su técnica, y al resto de la banda acompañarlo en este paseo atemporal. Un disco con sabor a clásico que se disfruta una y otra vez, descubriendo siempre detalles nuevos. Y una grabación con buen sonido marca de la casa. Otro acierto de SedaJazz Records. + info | relacionados