Lulendo
Lulendo
“Angola”
Buda Musique / Harmonia Mundi
www.budamusique.com
Lejos del desesperado devenir de los musekes –los barrios populares urbanos de Angola–, Lulendo muestra su cara más afable y alegre con una música tremendamente vitalista y contagiosa para enterrar las miserias cotidianas con la pala de una prodigiosa y seductora voz que se maneja de forma políglota –en kikongo, lingala, francés o portugués–. Su timbre diáfano, y a veces ensoñador, recuerda al de paisanos célebres como Waldemar Bastos o Bonga, aunque con la calidad que derrocha su factura no les anda a la zaga. Escoltado por una abultada formación de lujo, en la que se dan cita el violín de Didier Lockwood (Frank Zappa, Allan Holdsworth), el piano de Lalo Zanelli (Minino Garay y Los Tambores del Sur), la guitarra portuguesa de Phillip de Sousa (Bevinda, Nomad’s Land, Mood Indigo) o la flauta de Magic MalickLulendo, que también se las da de instrumentista –lo mismo se atreve con la guitarra que con el likembé– recrea el día a día en los mercados de las ciudades y pueblos (Maseke), las fiestas en la playa con las marimbas y los batuques (Mandingo sound) o la nostalgia de amores perdidos (Pesa). Gozoso tercer álbum de este angoleño afincado en Francia, que no elude su vena benéfica como demuestra su implicación en proyectos humanitarios como el de la Asociación Gaïa. Para colocarlo en la misma estantería que los discos de Richard Bona, Lokua Kanza, Bidinte o Seydú. // Miguel Ángel Sánchez Gárate