La Bundu Band

yH5BAEAAAAALAAAAAABAAEAAAIBRAA7 - La Bundu Band
La Bundu Band
«Sembrant beats, recollint revolució» New Beats, 2014

El espíritu inquieto de Albert Maynou, que militaba anteriormente en Skafam, le llevó a experimentar con la electrónica, la gralla y la dulzaina en una suerte de cóctel, que tiene la suficiente enjundia y originalidad por el poso mediterráneo que surge de semejante aleación. Con dos discos en las alforjas: Guerrer rebel  (Quimera Records, 2010) y Samurai cat (New Beats/Kasba Music, 2012), el cuarteto formado por Dr Maynovi, responsable de la voz, gralla, tarota (un instrumento de viento catalán de la familia de los oboes) y programaciones; Garbo, violín, bajo y coros; Xelo, guitarra y coros; y DJ Willow, el encargado de las programaciones, scratches y coros; prosiguen en esa vena iniciada en los noventa por la formación británica Asian Dub Foundation, o los franceses La Phaze, ya en la década 2.0. En su taller caben una amplia gama de materiales sonoros: desde el dubstep, el reggae, el ragga, el hip-hop, el drum & bass, el rock, e incluso el folk de la tierra (baste con escuchar las melodías de 24601, con esa introducción a cargo de la gralla; o la parte intermedia de Joana, que rezuma sentir popular por la utilización de instrumentos tradicionales). Si en los discos anteriores habían tirado de agenda con colaboraciones a cargo de la cantante de soul Raquel Xiberta, María Comalata (Relk), el poeta e historiador Jordi Bilbeny, el tándem mexicano de hip-hop Casta de Bronce, los valencianos Obrint Pas, Fermín Muguruza o Rude Hi-Fi, entre otros, ahora se sirven de Álex Cabanas en Fire, freedom, fighter; los valencianos Aspencat en 24601; los madrileños Dremen en Blood & dust; y el apretado set de Amparo Sánchez, La Sra. Tomasa, El Laietans y Batucada Luta Sem Pausa en Fruta fresca. Los aires festivos y de pista de club de Perdent la fe, con ese ritmo vertiginoso de ragga y dubstep; o las melodías orientales de Drets y deures, marcan algunos de los puntos álgidos del tercer álbum de estos agitadores de sonidos. Los temas, que rebosan un encofrado de compromiso y posicionamiento político, no escatiman en mensajes de fondo con un discurso de lo más actual y que va en consonancia con los tiempos que tocan vivir. La Bundu Band no hacen más que seguir esa senda abierta al alimón por paisanos como La Kinky Beat, y en la que las guitarras, los platos, las grallas y los samplers platican entre si sin estridencias y con un único fin: invitar al baile y a la reflexión. + info I Relacionados I Miguel Ángel Sánchez Gárate