José Manuel León
José Manuel León
”Sirimusa”
Bost Espacio Creativo
Forjado en la disciplina extrema de la escuela de guitarra algecireña, entre la complejidad facilista de Paco de Lucía y los vanguardismos de Cañizares, José Manuel León ha compaginado su carrera flamenca, que incluye desencuentros iniciales con el mundo de las peñas a causa de sus innovaciones musicales, con otra carrera exploradora que le conduce al drum and bass o el jungle, y a colaborar con Rosana, Tamara, Pastora Soler, José el Francés o Raimundo Amador. Compositor de música para el baile y para guitarra, había grabado ya algunos de sus temas en trabajos colectivos, pero Sirimusa es su primer disco como solista y aparece justo cuando José Manuel León se consolida como tocaor habitual de Carmen Linares, un dato altamente significativo. Asistimos en realidad a dos celebraciones simultáneas: la del guitarrista acompañante y la del guitarrista solista. Pues también son redobladas las virtudes y las bellezas de Sirimusa, donde relucen a un tiempo un compositor efectivo y un intérprete virtuoso, tan interesado en el primer flamenco como en el último jazz. Una endiablada técnica le permite alternar aires más jondos como Chorroskina (alegrías), Río de la Plata (granaína), Travesía de la soleá y Plaza la Palma (bulería) con otros más jazz-rockeros y ochenteros como Tonga (tangos), Hay que ser positivo (rumba), Isla Verde (bulería) y Los niños del atún (rumba), que son los que dan sonido al disco y explican las impactantes fusiones con las que empieza: Sirimusa (bulería) y Rejas de bronce (tanguillos-tientos-tangos-bulerías), siendo esta última pieza la única que incluye cante. Abundan los temas rítmicos, pero se refuerzan con sobriedad, mediante exquisitas percusiones y bajo, y también hay lugar para la guitarra sola (granaína y soleá). // Garbín González