Altertango
Altertango
Buenos Aires, centro cultural Torquato Tasso
26 de mayo 2010
Estamos nuevamente en San Telmo, barrio de la ciudad de Buenos Aires, con algunos limites geográficos claros como el Río de la Plata o el parque Lezama (uno de los bellísimos pulmones de esta ciudad) en su corazón se encuentra este teatro-bar.-centro cultural Torcuato Tasso templo tanguero, con la rara sensación de que después de atravesar el cortinado que lo separa del mundo real, entramos a cierta corriente arterial que seguramente nos modificara no dejándonos ser los mismos a la hora de nuestra partida. Mas allá de algún tema escuchado muy parcialmente de Altertango, estaba todo armado para el asombro, era la noche posterior al mas grande festejo popular que haya sucedido en la ciudad de Buenos Aires (seis millones de personas en las calles por el festejo de los 200 años de la Argentina) y a pesar de esto una buena cantidad de gente se ubicaba cómodamente en esta catedral del tango hasta ahí los dioses. Sin rodeos, directamente en la sala hicieron su aparición los Altertango para la presentación de su tercer trabajo Melodramas MDR records, 2010 después de Tormenta (2007) i Altertango (2004), siempre en la misma discográfica, sus músicos Ezequiel Acosta en bandoneón, Pablo Conalbi en batería y percusión, Patricio Ibire en el bajo, Elbi Olalla en el piano y Victoria di Raimondo en la voz, mas Rub un dj, acá la primera parada, que bien le hace a este tango su inclusión, sumada a una excelente performance quien podría negar la sonoridad porteña de este dj Este escribir tiene como intención que puedan volar en un acto imaginario y compartan las miles de sensaciones a las que uno esta expuesto de frente a un acto tan creativo como lo es el tango y aun mas en su casa. La banda gracias a la batería y su bajo tiene un rítmica muy particular para el genero, pero vayamos a la pianista-compositora Elbi Olalla que mas allá pero mucho mas allá de sus condiciones técnicas que no le faltan pero que podríamos encontrar en miles de excelentes interpretes, deja el habito de una muy buena pianista para endosar el de una ráfaga de creatividad, marcando ritmos enloquecedores acariciándonos con melodías amorosas, en fin señores cuando estábamos recomponiéndonos de tanta musicalidad volvió a ponerse el traje de mujer-pianista, el trance había ya pasado eso creía, porque había llegado el momento de las diosas, de frente a nosotros se había ubicado la señora Victoria di Raimondo una mezcla rara de Nini Marshal (actriz argentina gloriosa de otros tiempos)y Janis Joplin, el mejor de los cócteles posibles, dado que esta pequeña tromba de mujer produce el mas querido sentir tanguero, una manera de frasear por demás particular, uno vive, tiembla junto a ella, puedo asegurar que en varios momentos no puede dejar de ser conciente de amar eternamente a este maravilloso arte de cantar. Una mención particular merece Mi tango triste de Contursi y Troilo ( 1946 ) sabor de barrio, retazos de amor buscados inútilmente, dolores conocidos solamente en noches de terrible soledad, agudos cercanos a la desesperación, versión fatal, amorosa, ahora si la transformación, esta pequeña mina era gigante dulcemente gigante. Si no alcanzaba, la pequeña-gran mina de este nuevo tango, se le ocurre interpretar Olvidius tema de su autoría, pocas serian las palabras que hubiese escrito en esos momentos, su letra, la melodía y esta manera tanguera-rockera de cantar y partirme el corazón Hubo varios temas clásicos, Alltertango no te permite la indiferencia, dado que se súper juega en los arreglos, llegando el turno de nuestros queridos demonios, si aquellos que podrán decir que esto no es tango, que ella no es ortodoxa al cantar, que hace un dj en esto, que la batería no y demás, demás cosas con que el demonio se divierte, sabiendo que uno y lo otro son la misma cosa en este enorme techo tanguero que por suerte da para todo. El final a mil, con versiones fantasmagóricas, sublimes con la fuerza y la emoción necesaria de hacer que los ecos de sus voces lleguen hasta ustedes a pesar de los solo 11000 km que nos separan de la península y que a mi me hicieron transitar una vez mas este barrio de San Telmo acompañado de dioses, diosas y demonios. Altertango Relacionados // Daniel Outeda