Albert Cirera
Cuando estas escuchando la que creías última generación de músicos de jazz en esta ciudad, ya viene la siguiente pegando fuerte.
Albert Cirera es un joven saxofonista que está tocando mucho y muy bien.
La primera vez que escuche tu saxo creo que fue en Campo de Agramante Javier Galiana & Spice Berberechos. ¿Qué hacías con un grupo tan peculiar?
Ya me gusta tocar en historias abiertas, conocía a Javier del ESMUC
¿No provienes del Taller de Músics?
No, nunca he estado en el taller, empecé en esto del jazz en unos cursos de verano en Igualada, al año siguiente volvía a apuntarme y conocía a Alfonso Carrascosa decidí que quería dedicarme en serio, seguí clases en Esparraguera mientras iba al Instituto, después en la tienda de saxos de 3 x 4 en la calle del Carmen. En Igualada seguía con el violín y entonces empezaron a ofrecer grado medio de música moderna, y de ahí al ESMUC, la nuestra fue la primera generación.
Que otros profesores tenías
Allí estuve con Eladio Reinón con quien aprendí mucho y después Xavier Figuerola, más tarde un año en La Haya. En los berberechos de Galiana fue por casualidad, Ernesto (Aurignac) estaba enfermo y tuve que substituirlo para una gira por Hungría. En el ESMUC he tenido muchos grupos, con los Nelson Project ya es el segundo disco que editamos, pero este Els Encants me hace mucha ilusión. Son temas míos que hace tiempo que compuse (algunos de ellos) y por fin estaba seguro que quería grabarlos con estos músicos.
A Domenech si que lo conocía, pero a los dos Marcos no los había escuchado.
Marco Mezquida está tocando muchísimo casi cada día, es una pasada, es buenísimo, y con Marko Lohikari, había coincidido hace un tiempo y tuve claro que era imprescindible en la formación.
¿Es más difícil gravar o editar?
Con Jordi (Pujol) ha sido fácil, tenía claro que quería gravar con fresh sound, es la discográfica con la que he crecido, si tuviese que escoger un disco entre todos los que he escuchado en mi vida sería sin lugar a dudas Indolents, de David Xirgu, con Gorka Benítez, Dani Pérez y Rai Ferrer, fresh sound records, 2000 eso demuestra mi confianza en el sello. El primer año que vivía en Barcelona tuve la suerte de que Mengual (David) me llamase para un grupo en el que él tocaba el piano, allí conocí a Pintxo (Villar)
Ahora mismo las generaciones van tan rápidas que no da tiempo a asimilarlas, ¿no?
Con tantas escuelas hay un montón de músicos buenos en esta ciudad, hay mucha gente para tocar, y aun que nos quejamos de que no hay salas, creo que el problema es que no hay público, no hay cultura de escuchar música en vivo y costará adquirirla.
Bueno vamos con el disco que presentáis. Albert Cirera & Tres Tambors, Els Encants. ¿Los tres tambores son los tres músicos que están contigo percutiendo?
No, aun que podía ser, el nombre ha generado controversia, me encanta. Se iba a llamar Cirera i tres tambors, es un juego de palabras pensando en la canción popular catalana si n’eren tres tambors se le ocurrió a un amigo de Igualada después de algunas cervezas.
La otra noche en el Jamboree el primer pase estuvo genial.
Si, me encantó hubo muy buena comunicación y el segundo pase, bueno te lo perdiste, fue mágico, los músicos estuvieron increíbles y con Julián (Sánchez) cada vez nos compenetramos mejor. De hecho estamos juntos en un proyecto muy guapo, se llama Free Art Ensemble.
Wayne Shorter
Es mi saxofonista preferido hace poco fui a escucharlo en Francia tiene un cuarteto con Jorge Rossi esa noche pensé que podría estar escuchándolo todo un día y no me cansaría.
Te encuentro cómodo en este cuarteto
Para mí era un reto, hace años también tuve un grupo a mi nombre Cirera y Camarillas, con dos baterías, contrabajo y cuatro pitos, pero me cuesta liderar ahora con estos músicos siento el concepto de grupo, como el de Jarret de los 70 o el actual de Shorter. Relacionados | Candido Querol