Ernesto Aurignac Orchestra
34º Festival Jazz Terrassa
Nova Jazz cava, Terrassa. 14 de marzo de 2015
Ernesto Aurignac es un joven saxofonista, compositor y director de orquesta malagueño que mucho me temo se va a convertir, por lo que escuchamos anoche, en una figura esencial para la música de este país. Presentaba Uno, Mosquito records, 2014. Dieciocho músicos en escena más los invitados que iban apareciendo a lo largo del bolo, un concierto de dos horas para presentar un trabajo que debe pasar ya mismo a la biblioteca de cualquier aficionado que se precie de serlo. La primera vez que escuché el disco me invadió la misma sensación que cuando descubrí la Orchestra de María Schneider, composiciones preciosas que saltan alegremente de cualquier etiqueta musical. En su orquesta encontramos figuras esenciales del jazz nacional, Perico Sambeat, Julián Sánchez con quién comparte la dirección de la orquesta y por lo que vimos, el amor por el proyecto, Ramón Prats, Pau Domench, Toni Belenguer, y un montón de grandes músicos escogidos a lo largo del panorama nacional, como bien decía Aurignac, lo difícil era cuadrar agendas, no sé como lo puedo conseguir pero mereció la pena. Empezó el concierto con Julián Sánchez dirigiendo una música angelical que salía del solo del arpa de Tiziana Tagliani, se fue incorporando la orquesta , después se quedó sólo el trío dándole el poder al contrabajo de Foster y cerrando el saxo alto de Aurignac que probaba a sonar sin micro delante de la orquesta. Sigue con dos temas empalmados, Génesis y Jerusalén, la alegría de la música judía se cuela en la sala, (todavía es posible la paz) el tenor de Enrique Oliver con su solo lo deja claro. Presenta un bolero, Sofía, y pide a Carme Canela que suba al escenario, con una introducción muy original la voz de Canela ya es lo que faltaba para que la noche fuese especial. Junta otros dos temas, Baal Zebú y Perícles, solo de Perico Sambeat con Ramón Prats remarcando con los palillos hasta que se queda sólo con la batería, enorme, como siempre el de Banyoles. Sigue con Isaías 40.22 vuelve a dirigir Julián Sánchez es como un espiritual a dos voces, por la derecha los vientos, por la izquierda las cuerdas, solo precioso de Pau Domenech. Solo del guitarrista Jaume Llombart, genial, entrada apoteósica de los vientos y cierra Martín Meléndez con su chelo. Nefesh Lee es una composición inspirada en Tristano y Konitz, Explica que para acabar van a tocar Samadhi e invita a subir a Carles Benavent, que se marca un solo que deja claro la valúa de este fenómeno, Blas Córdova «Kejio» para cantar, el hijo de Córdoba y Marc Miralta (que estaba entre el público) para que hagan palmas y la cosa ya llegó a cotas insospechadas, todos sabíamos que habría un bis, los músicos ya no se molestaron en bajar para volver a subir. Los temas del disco ya estaban, así que Aurignac aprovecha para presentar Salida de Emergencia que estará en su segundo trabajo, empiezan oboe y piano, aprovecha Julián Sánchez para volar un rato libre y aprovechando una rueda típica de blues, cada uno de los músicos va realizando un solo. En fin, el público lo pasamos genial pero Ernesto Aurignac será difícil que olvide está noche mágica, estaba feliz y combinando su participación como intérprete, es un monstruo con su instrumento, y su labor como compositor, observando cómo sonaba todo, atento a todas las miradas de sus músicos, y eso no es nada fácil. + info | relacionados | Candido Querol