Denis Guedj

yH5BAEAAAAALAAAAAABAAEAAAIBRAA7 - Denis Guedj Denis Guedj
"La medida del mundo"
Muchnik Editores
Traducción de Manuel Serrat Crespo

Entrando en materia: este libro se basa en la historia real de la medición del meridiano de Greenwich, entre Dunkerque (Francia) y Barcelona, para crear la medida del metro universal, llevada a cabo por dos científicos enfrentados a los avatares de la investigación básica, esa manera de buscar más allá del aquí y ahora, ese tipo de investigación que se hace sin grandes laboratorios. Soñar la realidad haciéndola. Todo ello en un contexto histórico que va de la monarquía a la Revolución Francesa y Napoleón. El libro, interesante y entretenido, cuenta la oposición entre la burrocracia y el deseo de saber. Habla de unos estudiosos que eran el no va más de la ciencia y que, gracias la Revolución Francesa, pasaron de ser unos inciertos colaboradores de un mundo en franca extinción (la monarquía, que luego volveria) a convertirse en estandartes de una claridad desconocida hasta entonces (los derechos humanos, todavía estamos en ello). Es un libro que pretende transmitir, a través de la novelización de la historia, el esfuerzo, la visión y la tenacidad que conlleva el anhelo de explicar nuestro mundo físico, no desde la distancia de lo ya hecho, sino desde la mirada, a ras de suelo, de científicos (y de las personas que participan de esta aventura del saber) que pretenden comprender de manera indiscutible de qué está hecho el Universo. El autor, Denis Guedj, profesor de historia de la ciencia en la Universidad Paris VIII, autor teatral, articulista contrario a la mundialización y lanzador de frases como “me opongo a los cultos” o “me gustaría parecerme al que tiro la primera piedra sobre el que tiró la primera piedra” (que se supone estaba libre de culpa) es un autor tan atrevido como para publicar un libro que se llama El teorema del loro, una novela para amar las matemáticas, una persona que pretende llevar la luz de la razón a un tiempo y un lugar donde los de siempre (de antes y de ahora) pretenden que reine la oscuridad. Algo que se agradece en tiempos de desinterés por el esfuerzo y de burricie premiada. // Felipe Ciratusa