Robin Trower, Ten Years After y Oli Brown Band
Robin Trower, Ten Years After y Oli Brown Band
XXIII Festival Internacional de Blues de Cerdanyola.
Cerdanyola, Pavelló d’Esports.
15 de octubre de 2010
Los platos fuertes de esta edición del Festival Internacional de Blues de Cerdanyola se concentraron en la noche del viernes, 15 de octubre. Y así se reflejó en la presencia de un gran número de amantes del buen blues en el recinto deportivo de la localidad catalana. El encargado de abrir el fuego fue Robin Trower, quien ofreció una majestuosa lección de manejo de su guitarra Stratocaster. Con unos solos interminables que fueron de lo mejor de la noche, este veterano guitarrista (cuya influencia han reconocido grandes músicos como Robert Fripp) demostró que, a pesar de su avanzada edad, quien tuvo, retuvo. Al punto de la medianoche aparecieron en escena los componentes de Ten Years After, bien es cierto que sin Alvin Lee, su histórico líder. Y es que, desde el año 2003, los otros tres integrantes originales de la banda (el bajista Leo Lyons, el baterista Rick Lee y el teclista Chick Churchill) viajan acompañados de Joe Gooch, excepcional guitarrista y excelente cantante que se ha convertido en un front man de gran autenticidad y que sudó e hizo sudar a los más veteranos de la banda. Según palabras de Rick Lee, con Gooch han ensayado más que en toda su trayectoria, un trabajo que les permite mantener un impactante estado de forma para alegría de sus seguidores. Resultó sorprendente (al menos para mí) que en el último lugar de la noche apareciera el artista menos conocido del trío programado, pues es una posición que se suele reservar para los cabezas de cartel. De todas formas, el término “menos conocido” es relativo, puesto que Oli Brown, a pesar de su juventud (apenas ha superado la veintena), se encuentra en gira constante por Europa y Norteamérica desde que cumplió 16 años. Los especialistas comparan su capacidad técnica con la de Jimmy Hendrix o Peter Green, si bien su estilo resulta muy ecléctico al combinar blues clásico con funk, soul e incluso punk. Y su versión de la sempiterna Fever fuera tal vez el mejor ejemplo de toda esta macedonia. Con Brown se cerró la noche y pudimos comprobar que Cerdanyola mantiene su privilegiada posición en la escena internacional de los festivales de blues. // www.ten-years-after.com | Relacionados | Josep Maria Meseguer