Juan Manuel Mora / Belén Maya
Juan Manuel Mora / Belén Maya
18 Festival Flamenco Ciutat Vella. CCCB 19 de junio del 2011
El joven cantaor Juan Manuel Mora, nacido en Cataluña, pero residiendo actualmente en Madrid, nos visitaba con un repertorio parecido al ofrecido hacia 15 días en el festival de Caja Madrid, en este caso la guitarra de Juan Ramón Caro la substituyó Juan José Ramos “Niño de la Manuela”, nada que objetar, un gran guitarrista substituyendo a otro grande. Empezó con granaina y media granaina, dejando claro que todo lo que sucediera iba a estar dedicado a Morente. Continuó con tangos, no sé por que pero entonaba en cada principio de verso, no está mal para coger el tono exacto, pero, o estaba muy nervioso, o si es una costumbre, no es una buena sensación para el público. Unas alegrías muy curiosas, casi sin ritmo al principio para ir ganando compás a cada paso, me gustaron mucho. Una seguiriya donde hay que felicitar sinceramente a “Niño de Manuela” genial en los espacios abiertos. Terminando la noche por bulerías. He de reconocer que a pesar de escucharlo dos veces en poco tiempo, volví a disfrutar con su cante. La segunda parte de la noche nos traía a Belén Maya, la prensa la aclama como la sucesora directa de Carmen Amaya, tiempo al tiempo. Al aparecer en el escenario una mesa de las que presagian cantes con acompañamiento de nudillos al estilo de la familia Los Zambos, parecía que la coreografía Tr3s que presentaba Belén Maya, iba a contar con sorpresas de cante, además Jesús Méndez es sin duda alguna una de las nuevas voces del cante jerezano a tener en cuenta. Pero de nuevo, como había pasado el día anterior con “La Moneta” volvió a ser el protagonista de la noche. Empezó Belén agarrada a un traje de cola blanco que encontró tirado en el suelo al lado de un mantón colgado con el que también estuvo “flirteando” se movió con soltura por todo el escenario con el traje de cola ejerciendo de compañero de baile, fue un inicio sorprendente i efectivo. Como el baile del palmero Felipe Matos mientras cambiaba las sillas de sitio para empezar unas alegrías. El baile de Belén parece sencillo por que carece de movimientos que sorprendan pero por eso mismo es más poético. Los brazos y las manos son sus mejores armas. Sigue con una soleá, y después unos cantes de Levante, en los que Méndez está magnífico, continuó con una fiesta jerezana con el traje de cola blanco moviéndose al compás de la genial guitarra de Rafael Rodríguez, creo recordar todavía unos fandangos en que se puso un mantón de Manila que alargaba más la majestuosidad de sus brazos. www.belenmaya.com relacionados // Candido Querol