Banda Olifante | 10.000 migrants
Banda Olifante
“10.000 migrants” Felmay / Karonte, 2011
Esta macro-formación italiana tiene más de un club de amigos que de una agrupación musical al uso, pues en sus abultadas filas de quince componentes, aún tienen sitio para invitar a más colegas al sarao. Tras su debút de homónimo titulo editado ya hace tres años, vuelven a destapar su crematística espita de sonidos globales. Ya anunciaban en su primer trabajo que su música adolecía de cortapisas. Y así lo reflejaban en su percepción del folclor mejicano, el jazz más actual o la música de la campiña rogmana. Quizás en esta nueva traca de canciones optan por inmiscuirse más en las latitudes del jazz, como puede comprobarse en la riqueza de sus ocurrentes y barrocos arreglos. Los aires klezmer de Klezmez y African dandy y el ska de aires balcánicos de Spanish Town, cuentan con el saxo alto de Matt Darriau (Paradox Trio, The Klezmatics). Las exultantes líneas jazzísticas del contrabajo de Nicolo Fiori, con el savoir-faire de grandes maestros como Ron Carter o Charles Mingus, suenan de forma elegante en el tema que da título al álbum, junto con una sección de vientos que da cuerpo a unas sonoridades indostánicos trufadas de arreglos de jazz. Zabumba tiene marcado acento afrobeat, mientras que Elephant dance suena a música de banda sonora con elementos vertiginosos propios de compositores de cintas de dibujos animados como Carl Stalling. Mas espectral suena Mangiatori di stelle, que recuerda a los temas más crípticos de sus compatriotas progresivos Area. En Le chemin du griot, impregnada de esencias totalmente africanas, gracias en gran parte al djembé y a la kora del genial Mamadou Diabaté, suenan unas palabras en wolof, pronunciadas por el senegalés Aladji Birame “As” Niang. Etere tiene tintes psicodélicos y crepusculares que recuerdan a algunas piezas setenteras de la Premiata Forneria Marconi, uno de los estandartes del prog-rock italiano. La incisiva percusión de Open circle sirve para dar pespunte a una canción optimista y exultante en cuanto a los arreglos de viento. L´Illusionista arranca con un aura de free-jazz para rápido desembocar en elementos propios de las fanfarrias balcánicas. Selanik soul, también con una presencia de sonoridades romaníes y algunos efluvios mediterráneos, suena jovial e invita al baile. http://www.bandaolifante.it/ I Relacionados I Miguel Ángel Sánchez Gárate